Después de aquella tarde
donde un simple beso
convirtió la mirada de la tarde
en un asombro interminable
jamás he podido borrar
aquellas palabras
que con tus labios
tatuaste en mi alma
porque ese beso
descubrió que mi alma
era tan frágil
como una orquídea
y llegaste con esa caricia
tan delicada de tus ojos
acurrucaste cada pétalo
con caricias, con besos
caminaste con mi mano
en tus instintos
con mis pasos
descubriendo
cada huella de tu rostro
y no te has podido escapar
o no me has dejado escapar
qué importa quién busca
el intento de habitar
en la añoranza
Hoy vuelves
desde mi recuerdo
para escribir un poema
en mi memoria
para contemplar
aquellas estrellas coquetas
que deambulan en la antigua
ciudad donde el eco y las piedras
van detrás de cada mirada
detrás de cada palabra
como buscando la miel
como impregnado de amor
ese destino travieso
que cada amanecer
busca un escape inexistente
una fuga desde la sonrisa
para retornar entre besos
y aquellas caricias
tan bendecidas por la razón
Hoy vuelves a mis brazos
hoy regreso a ti desde la eternidad
a lo lejos una simple mirada
viene buscando un poema
que comienza a nacer
desde el recuerdo de un beso
2 comentarios:
No puedes escapar de ese beso que nos llega desde la añoranza… desde las caricias de un poema...el embrujo de las estrellas coquetas se hace cómplice de los ojos y las palabras...no hay escape solo el beso nos salvara del destino, travieso sucumbimos al hechizo de los labios y del beso.
El poema intimista, sublime, coloquial, nos sentimos atrapados en ese beso que vendrá acompañado del poema de un fino lirismo...felicidades
...traigo
sangre
de
la
tarde
herida
en
la
mano
y
una
vela
de
mi
corazón
para
invitarte
y
darte
este
alma
que
viene
para
compartir
contigo
tu
bello
blog
con
un
ramillete
de
oro
y
claveles
dentro...
desde mis
HORAS ROTAS
Y AULA DE PAZ
TE SIGO TU BLOG
CON saludos de la luna al
reflejarse en el mar de la
poesía...
AFECTUOSAMENTE
JULIO
ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE BLADE RUUNER ,CHOCOLATE, EL NAZARENO- LOVE STORY,- Y- CABALLO, .
José
ramón...
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