No puedo arrebatarte los besos
que has depositado en mi piel
han penetrado como ejércitos
ocultos para apoderarse
de mi ciudad corazón
no puedo callar esas voces
que claman por tu regreso
por esos poemas que alimentan
la hoguera que ilumina
aquel sendero por donde
terminamos encontrándonos
Siempre corres a mis brazos
no puedo creer que aún abras
esa puerta silenciosa para mi
son tantos los milagros
que se filtran por las paredes
por esas rendijas misteriosas
que siempre que regreso
no necesito una historia
para entrar, para besarte
para cubrir tu cuerpo
hasta el siguiente amanecer
y luego marcharme
remontar el tiempo
y desaparecer
hasta mi próximo capricho
No puedo creer
que escribas tu nombre
con sangre en mi piel
que alces el vino
y laves todos mis pecados
los amontones en esa habitación
a donde jamás has vuelto a entrar
No puedo creer
que seas la misma hechicera
que un día rompió mi corazón
en mil fragmentos de deseo
que los mezcló en ese canto
misterioso y salvaje
que devolvió mi corazón
atado a tus encantos
Otra vez estoy en tus caricias
en esa cama donde siempre
terminas extrañando mis besos
en esa habitación tan invisible
como la estela de humo
de esa estrella majadera
otra vez no habrá pociones
para atar todos mis deseos
otra vez existirá la partida
otra vez el tiempo dejará
un espacio sin voces
entre nosotros
y estarás ahí
pendiente de mi regreso
ausente de todos los milagros
disfrutando cada una de esas
melodías que logras atraer
hasta el centro de tu hechizo
porque yo soy tu hechizo
tu silencio, tus labios
ese deseo infinito
de sentirte libre
abrazada a mi cuerpo
Otra vez estoy ausente
tu alma me persigue
desde ese hechizo silencioso
protegiendo mis pasos
impidiendo que otra luz
se apodere de mi camino
que otra hechicera
convierta mi destino
en un poema sin rostro
2 comentarios:
no siempre podemos romper los hechizos cuando el amor entra por todas las renfijas del alma y lo alimentamos de bellos poemas que encienden las hogueras del deseo y de los besos y el nombre de la persona amada esta escrito con nuestra sangra en todos nuestros rincones donde nunca existieron los besos ni las caricias...Muy lindo poema..felicidades ,gran poeta...
Julio visitar tu blog es, convertirse en mar
y dejar que besos en textos y palabras acaricien su espuma, el salitre se endulza,se hace fragil
la roca,y se sienten caricias de un viento marinero que llega desde lejos, se serena la mar, y cerrando los ojos me transporto a tu playa.
Publicar un comentario